- Eres la promotora de Women in a legal world. ¿Cómo surgió la idea?
Surgió curiosamente tras asistir a algunas de las comidas organizadas por Nuria Vilanova, Presidenta de Atrevia, a las que empecé a unirme hace ya tiempo. Mirada Plural, es una una red de mujeres directivas que se reúnen varias veces al año para conocerse y buscar puntos en común bajo un mismo lema: lo que nos une por encima de lo que nos separa.
Después de haber estado en varias comidas me di cuenta que esta forma de hacer networking era inmejorable, ya que, el formato de comidas si quieres casi de trabajo, nos permitía a las asistentes (mujeres vitales, con fuerza y sobradas motivaciones) podernos conocer de cerca, “sin focos”, y a identificar aquellos elementos que teníamos en común entre nosotras así como iniciativas que compartíamos y/o nos gustaría lanzar.
Estas comidas fueron las que me inspiraron a reproducir el modelo en el ámbito del sector legal en nuestro país, donde si bien, existen proyectos que aúnan a mujeres a nivel sectorial, no existía una red que incorporase a mujeres de todos los ámbitos de la justicia a nivel nacional. A la vista de ello me propuse crear una red de profesionales del sector con el objetivo de interconectar a mujeres que destacaban en sus respectivos ámbitos de actuación.
- ¿Qué esperas de esta asociación?
Me gustaría que se convirtiera en un referente dentro del sector jurídico en España, en un lugar de encuentro de profesionales del mundo de la justicia donde poder descubrir referentes femeninos en todos los ámbitos y especialidades jurídicas para incorporarlos en las mesas de debate, en los medios de comunicación, en los claustros de las escuelas de negocios, en las cátedras y en los consejos.
- ¿Qué cuestiones te gustaría que se trataran en futuras reuniones?
Sería interesante que continuáramos hablando de cómo podemos ayudarnos, inspirarnos, promocionarnos, y trabajar; así como conectarnos con otras redes de mujeres de otros ámbitos sectoriales tanto a nivel nacional como internacional con el objetivo de desarrollar y aunar proyectos comunes.
Creo que es fundamental que trabajemos en primer lugar en hacer visibles a las mujeres líderes para de este modo, poder ayudar a formar desde el principio a las líderes del mañana. Los jóvenes, lo tienen al alcance de su mano y nuestra obligación no es otra sino ayudarles a que consigan sus objetivos. Como dice Berasategui la clave está en la generosidad, en la transmisión de conocimientos, dar a otros la oportunidad de aprender lo que sabes para que ellos lo mejoren.
- Cuéntanos cuánto tiempo llevas en el sector jurídico y qué proyecto/operación (sin desvelar datos confidenciales) ha sido la que más te ha marcado y por qué
En el sector jurídico llevo desde que terminé mi carrera de derecho y administración y dirección de empresas y desde entonces he tenido la oportunidad de trabajar tanto en España como en Londres en diferentes despachos nacionales e internacionales con profesionales de primer nivel.
En cuanto a un proyecto que me haya marcado, te diré que ciertamente han sido muchos los que lo han hecho, pero si tengo que elegir quizás una de las operaciones que marcó un antes y un después en mi carrera y en mi manera de enfocar la profesión fue un caso en el que tuve la suerte de participar mientras estaba en Londres y que involucraba a varias jurisdicciones y oficinas de distintos países.
Actuábamos como demandantes y me impactó la coordinación existente entre los equipos de litigación y de otras áreas involucradas tanto de la oficina de Londres como de otras oficinas que participaban en el caso. Esta coordinación se puso de manifiesto principalmente a la hora de definir una estrategia común, ya que tuvimos que analizar detalladamente con carácter previo a iniciar cualquier tipo de acción, los potenciales riesgos jurídicos a los que nos enfrentábamos en cada una de las jurisdicciones. De esta forma, pudimos decidir cuál era el mejor tipo de acción a interponer en cada una de las jurisdicciones (llegamos a interponer acciones civiles, penales y un arbitraje) y el momento temporal en el que llevarlo a cabo. Si bien al final acabamos llegando a un acuerdo con la contraparte, de ese caso aprendí tres cosas fundamentales, en primer lugar a trabajar en equipo (una lección que me ha acompañado a lo largo de mi carrera), en segundo lugar el valor de cuidar el detalle (dar ese plus que nadie espera al cliente y que tanto nos gusta cuando lo recibimos) y en tercer lugar y por ello no menos importante a poner cariño en todo lo que hacemos porque cuando las cosas se hacen con cariño eso se ve inevitablemente reflejado en el resultado que por extensión, además es mejor.
- ¿A qué retos crees que se enfrentan los operadores del mundo jurídico en los próximos años y qué deberían hacer para ser capaces de afrontarlos?
Entiendo que el principal reto al que se enfrentan los operadores del mundo jurídico es el de retener el talento en general y lamentablemente el femenino en particular. Creo que tenemos que tener la capacidad de establecer estructuras flexibles con la suficiente habilidad de adaptación a entornos tan cambiantes como los actuales; con una visión a corto, mediano y largo plazo de anticipación, de innovación y de gestión si queremos sacar adelante proyectos. Y esto no se puede hacer perdiendo talento de calidad –la mayor parte del tiempo además femenino- por el camino. Necesitamos que cada vez más mujeres se sienten en los puestos de toma de decisión para poder aportar su visión, necesitamos acabar definitiva y rotundamente con el techo de cristal.
Asimismo, creo que la clave del éxito está en ser capaces de conectar con los equipos a todos los niveles, me estoy refiriendo por ejemplo a tener la capacidad de integrar a los millennials en la estructura empresarial actual. En este sentido, hay dos charlas de Simon Sinek, escritor y coach británico, que estimo interesante que todos veáis. Una es una charla TED sobre cómo los grandes líderes inspiran la acción y que dio lugar a un libro “La clave es el por qué” que viene a poner de manifiesto que, para crear un impacto en lo que hagamos, tenemos que tener claro una sola cosa y es el por qué, ya que a partir de ahí, el resto irá fluyendo naturalmente. La segunda es sobre los millennials donde explica por qué los millennials son como son y cómo son las organizaciones quienes tienen la responsabilidad de adaptarse a ellos.
- Por último, háblanos de alguien o de algo que te sirva o te haya servido como fuente de inspiración y por qué.
A lo largo de mi carrera he tenido la suerte de encontrarme con auténticos profesionales del sector que me han servido como fuente de inspiración y me han impulsad, motivándome a querer mejorar y crecer tanto personal como profesionalmente. Estas personas han sido tanto compañeros de despacho, como también personas a las que he reportado o he tenido a mi cargo. De todos ellos he aprendido muchísimo y cada uno a su manera me ha enseñado a querer y respetar la profesión. No obstante, sin lugar a dudas, ha sido mi padre, quien también trabaja en el sector legal, mi auténtica fuente de inspiración desde el principio y a lo largo de estos años. De él he aprendido entre otras cosas, que ganar un premio o conseguir un ascenso es importante, pero que el verdadero éxito viene de mirar hacia atrás y ver a las personas que creyeron en ti, que te ayudaron y que en algún caso incluso pusieron su reputación en juego por ti.
Al final en la vida lo importante es la calidad de las relaciones que desarrollamos a todos los niveles, el cómo superar los obstáculos que van surgiendo por el camino conjuntamente y los sentimientos que se generan cuando compartimos una victoria con nuestro equipo. Claramente, el éxito no sirve de nada si no puedes vivirlo “en familia”.